Según el libro “El turismo desde la geografía.
Análisis territorial del turismo”, escrito por Aldo Guzmán Ramos y Guillermina
Fernández, “el turismo es, fundamentalmente, una práctica social de naturaleza
espacial, que es generadora de actividades económicas y que ha dejado de ser
marginal, para convertirse en estructural.
Junto con eso, el crecimiento económico del turismo,
ha sido extraordinario en los últimos 30 años configurando, una geografía
específica con regiones emisoras y receptoras.
La geografía, permite obtener un conocimiento integral
del turismo, por la convergencia de las vertientes sociales y ecológicas de
otras disciplinas, permitiendo así alcanzar una visión integrada del espacio
turístico. Pero este espacio es sumamente complejo, por lo que es necesario un
esfuerzo de racionalización científica y metodológica.
Por otro lado, teniendo en cuenta los múltiples
efectos espaciales de las actividades turísticas, las variables densidad y
escala son cuestiones fundamentales para entender las formas de articulación
territorial del turismo.
Precisamente, el uso de las imágenes nos permite
identificar cuáles son los componentes sobre los que se vertebran los destinos,
que a priori, en su clasificación, responden a criterios geográficos.
En ese contexto, es que el geógrafo de la Universidad
de Chile, Mauricio Soler Escobar dará inició a un laboratorio/taller para
enseñar la aplicación de Sistemas de Información Geográfica (SIG) dirigido a
profesionales del área de turismo.
Mauricio Soler explica que “los Sistemas de Información
Geográfica (SIG), se han constituido en el último tiempo, en una herramienta
esencial para el registro, diagnóstico y análisis de datos de todo tipo, que
puede ser utilizada en innumerables áreas de trabajo y disciplinas, permitiendo
generar geo-información para el análisis espacial, con importantes grados de
exactitud y eficiencia”.
Un Sistema de Información Geográfica (SIG o GIS, en su
acrónimo inglés), es una integración organizada de hardware y software,
datos geográficos y personal, diseñado para capturar, almacenar, manipular,
analizar y desplegar en todas sus formas la información geográficamente
referenciada con el fin de resolver problemas complejos de planificación y
gestión.
También puede definirse como un modelo de una parte de
la realidad referido a un sistema de coordenadas terrestre y construido para
satisfacer unas necesidades concretas de información.
“Es conocido que tanto la planificación como la
gestión del turismo, deben ser abordadas teniendo en cuenta, el máximo de
factores posibles que influyen en su desarrollo. En este sentido, las
innovaciones tecnológicas desarrolladas en las últimas décadas, impulsaron una
nueva forma de enfrentar dicho reto, añade el profesional.
En este contexto entonces es que el manejo del SIG se
constituye en una herramienta que permite el registro de datos, posibilita su
control y su actualización continua, convirtiéndose en un soporte fundamental
para el desarrollo turístico, ya que permite el análisis espacial de fenómenos,
así como de los servicios y equipamientos existentes y potenciales.
El objetivo de este curso, es entregar a los
profesionales del turismo, las herramientas esenciales para el desarrollo de
aplicaciones para el análisis espacial del sistema turístico mediante
aplicaciones SIG en diversos ámbitos de esta actividad enfocándose,
especialmente en proyectos turísticos.
El manejo de esta herramienta, les permitirá a los
profesionales, desempeñarse en forma más competente y eficiente en el mercado
laboral del turismo, ampliándoles sus posibilidades de inserción laboral.
El trabajo con los alumnos se desarrollará mediante
clases prácticas presenciales. En cada clase se desarrollarán principalmente
ejercicios y aplicaciones para que los alumnos adquieran los conocimientos en
forma eficiente. Por lo tanto, la metodología del curso es esencialmente
teórico-práctico, con énfasis en lo práctico.
“La tecnología aplicada al turismo, ayuda a visualizar
la competencia entre los destinos, la centralización de los destinos
turísticos, la saturación de estos y por ende, la necesidad de una industria
que sea territorialmente sustentable y respetuosa con el medio ambiente”,
finaliza el profesional.