El turismo de reuniones hoy enfrenta grandes
cambios y los países que lo lideran deben emprender acciones orientadas a
mantener esa posición de privilegio, tanto para crear nuevas oportunidades de
negocios que les permitan diferenciarse, como para fomentar la diversificación
de los mercados y consolidar los éxitos obtenidos en los mercados
tradicionales.
De esta forma, las tendencias mundiales apuntan
a la digitalización de los servicios de cultura y turismo para la creación de
destinos turísticos inteligentes, especialmente aquellos enfocados en los
viajes de reuniones.
“Un destino turístico inteligente es un espacio
innovador, ampliamente accesible, que utiliza tecnología de punta, en busca del
desarrollo sostenible y una experiencia turística de calidad, y se caracteriza
por basarse en una estructura tecnológica de vanguardia que facilita la
integración del visitante e incrementa la calidad de su experiencia en el
destino”, sostiene Álvaro Castilla, Gerente Comercial de Travel Security y
director de Business Travel Expo Santiago (BTE), la primera feria de viajes de
negocios de Chile.
La feria, a realizarse el próximo 29 de octubre
y organizada por Travel Security e Interexpo, abordará esta temática de manera
de analizar, junto a connotados representantes de la industria, los desafíos
tecnológicos a los que se enfrentará Chile en los próximos 10 años.
En su primera edición, BTE será una instancia de
encuentro para resolver retos relacionados con innovación, viajes de
incentivos, propuestas de valor adecuadas para los clientes corporativos,
desafíos tecnológicos, desarrollo hotelero en Chile y tecnología para
simplificar la jornada del usuario, de manera de impactar de manera positiva el
desarrollo del sector a nivel nacional, junto con lograr una mayor eficiencia
en los viajes de negocios.
“El turismo de reuniones, incentivos o de negocios, es
un segmento de la industria turística que le deja ganancias al país en el
momento del evento y durante la estadía de sus asistentes, a la vez que abre
las puertas a potenciales negocios, lo que lo convierte en un foco importante
para el desarrollo de la economía del país”, enfatiza José Miguel Soto-Luque,
director de Interexpo.
La inteligencia turística es transversal a todos
los segmentos, por lo que resulta esencial contar con la tecnología apropiada
que pueda ser de utilidad según los objetivos del destino en torno a la
captación de eventos y congresos.
“Disponer de un buen nivel de conectividad, una
completa y ágil web del destino, apps específicas que permitan el flujo de
información y agendas actualizadas entre los interesados y potenciales
asistentes a un evento, y desarrollar plataformas online que brinden
información específica en tiempo real, son elementos estratégicos que permiten
atender las necesidades de los organizadores de eventos y congresos desde una
dimensión de inteligencia turística”, agrega Castilla.
De esta forma, contar con dinámicas de inteligencia
turística en un destino que busca enfocarse en el segmento MICE (Meetings,
Incentives, Congresses & Events) o turismo de reuniones resulta clave para
alcanzar un posicionamiento competitivo en el mercado a escala global. Esto
debido a que los cambios estructurales experimentados en los modos de gestión
del destino, a través de la irrupción de nuevas tecnologías en internet y los
dispositivos móviles, han causado impacto tanto en los modelos de negocios como
en las estrategias de promoción y comunicación del destino.
Para mejorar el posicionamiento a nivel país se debe
contar con estrategias de marketing alternativas e innovadoras, donde la
promoción del turismo debe incluir el desarrollo de eventos y manifestaciones
culturales/deportivas que aumenten el flujo de turistas y den a conocer el
país.
Un ejemplo de ello es la integración de Chile a
bloques comerciales como la Alianza del Pacífico, el Foro de Cooperación
Económica Asia-Pacífico (APEC) y la Organización para la Cooperación y el
Desarrollo Económico (OCDE).
Para Castilla, “pertenecer a estos bloques ha
permitido mejorar el intercambio comercial entre los países, creciendo la demanda
en todos los sectores asociados a esta industria. En relación a esta misma
dinámica, se mejoran los estándares de calidad, aumenta el nivel de competencia
y se optimizan las propuestas de valor de los clientes”.
En forma paralela, la próxima realización de la COP25
y APEC será un gran impulso para el sector por tratarse de los eventos más
importantes que albergará el país en los últimos años. Se espera que la
ocupación hotelera para dichas fechas esté al máximo y la generación de
ingresos al país sea importante, sin dejar de lado que la agenda económica y
política estará centrada en esta región.
Chile tiene atractivos naturales y de contra
estacionalidad que son factores claves para el desarrollo del nicho de viajes
de incentivos. Los desafíos del sector apuntan entonces a que Santiago se
convierta en un centro de eventos que reúna encuentros de tamaño relevante en
términos de asistentes.
“La conectividad ha mejorado en el último tiempo y es
importante mantener las condiciones para un creciente nivel de competencia,
tanto en el mundo de las líneas aéreas como en el del hotelería”, puntualiza
Álvaro Castilla.
Por otra parte, el Gobierno de Chile, a través de la
Subsecretaría de Turismo, busca liderar y promover los cambios para aumentar la
competitividad del sector turístico. Las acciones a realizar son
interdependientes y buscan satisfacer las necesidades de los turistas y agregar
valor a los servicios ofrecidos, con el fin de aumentar la llegada de
visitantes, incrementar su gasto promedio diario y extender su tiempo de
estadía.
Según cifras de la Organización Mundial del Turismo
(OMT) entregadas este año, se determinó que el sector turístico genera el 10%
del PIB global, generando oportunidades de empleo en una relación 1 de cada 11
puestos de trabajo en el mundo. Además, se proyecta que las ganancias del
sector crecerán a un ritmo del 3% anual durante la próxima década.
Durante la inauguración de la segunda versión del foro
Tourism Tech Adventures para las Américas, realizado en julio pasado, se
manifestó el papel de Chile como líder del turismo inteligente, enfocado en
adaptar las ciudades para que logren convertirse en destinos turísticos de
primera, lo que brindará beneficios en la actividad económica y social del
país, instalando la cultura de transformación digital en esta nueva forma de
hacer turismo.