Esta instalación de última
generación estará dedicada a la elaboración de los populares cafés lacteados de
la marca, destinados tanto al mercado nacional como a la exportación,
consolidando la posición de Chile como un hub estratégico para la producción de
NESCAFÉ en la región.
La creciente preferencia por
los cafés lacteados, especialmente entre el público joven, ha sido un factor
clave en la decisión de abrir esta nueva planta. Con una inversión cercana a
los US$10,5 millones, permitirá producir en Chile una categoría que hasta ahora
dependía de la importación.
La nueva planta incorpora
tecnología de última generación, incluyendo el sistema “Eye Tracker”, que
permitirá fabricar más de 1.100 toneladas al año, equivalentes a más de 60
millones de tazas de Nescafé lacteados.
Con envases reciclables y de fácil preparación, los productos estarán disponibles en variedades Cappuccino, Vainilla Latte, Moka y Doble Choca Moka y ya se están exportando a Uruguay, Perú y Paraguay.
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