El emblemático hotel ubicado
sobre el Pacífico conmemora dos décadas bajo la marca Sheraton, consolidándose
como un referente de hospitalidad y motor del desarrollo turístico de la
región.
Viña del Mar, julio de 2025. Donde el mar toca las rocas de Caleta Abarca, se alza imponente Sheraton Miramar Hotel, un verdadero emblema de la ciudad jardín.
Este 2025, el hotel celebra 20
años bajo la prestigiosa marca Sheraton, conmemorando no sólo su evolución como
ícono arquitectónico, sino también su profunda huella en el desarrollo
turístico, económico y cultural de Viña del Mar.
Desde su incorporación a Sheraton en 2005, Miramar se transformó en sinónimo de hospitalidad de clase mundial. Fue el punto de partida de una nueva era: aquella en la que Viña del Mar se abrió con fuerza al turismo internacional, a los congresos, a los eventos de gran envergadura y al visitante en busca de experiencias memorables.
“El
secreto del éxito ha sido una fórmula que conjuga excelencia en el servicio,
visión a largo plazo y un equipo humano comprometido con la experiencia del
huésped”, destaca Patricio Carvallo, gerente general de Sheraton Miramar Hotel.
Más allá de sus vistas espectaculares y su arquitectura reconocible, Sheraton Miramar ha sido, durante estos años, un actor clave en la vida de la ciudad: generando empleo, atrayendo inversión y consolidando a Viña como un destino estratégico.
Hoy, con más de
cien colaboradores —muchos de ellos con una extensa trayectoria en la
propiedad— el hotel sigue siendo un pilar en la comunidad local y un referente
de resiliencia, tras superar incluso los momentos más complejos, como la
pandemia.
Alta cocina con esencia marina
Uno de los sellos que
distingue al Sheraton Miramar es su propuesta gastronómica, que rinde homenaje
a los productos del mar y a la tradición culinaria chilena con un giro
contemporáneo. Travesía, su restaurante principal, ha sabido cautivar tanto a
visitantes como a locales con una carta sofisticada, fresca y creativa, donde
cada plato cuenta una historia ligada al océano Pacífico. Esta apuesta por la
calidad y el sabor lo ha consolidado como un destino imperdible para los
amantes de la buena mesa.
Además, cada domingo convoca a toda la familia gracias a sus ya tradicionales buffets, que ofrecen alternativas para todos los gustos, destacando platos calientes, entradas, pescados, mariscos y un espacio dedicado exclusivamente a los más variados postres. Otro imperdible son sus Cenas Maridaje, en las que se encuentran las mejores etiquetas de vinos del país con platos creados especialmente para la ocasión. Y si de coctelería se trata, el Bar Farewell sorprende con panoramas semanales y tragos de autor.
Un aniversario con sabor a
vino chileno
Como parte central de las
celebraciones, Sheraton Miramar lanzó el pasado miércoles 9 de julio una
edición limitada de Carmenere Gran Reserva, desarrollada en colaboración
con la prestigiosa Viña Casa Silva. El exclusivo evento de
presentación, realizado en su Bar Farewell, reunió a clientes, socios,
colaboradores, prensa e invitados especiales, quienes vivieron una experiencia
inolvidable marcada por la elegancia, la buena música y la alta gastronomía.
“Sheraton Miramar no es sólo
un símbolo de Viña del Mar, es un lugar donde se crean recuerdos memorables.
Este vino representa un homenaje a nuestra historia y una invitación a seguir
compartiendo nuevas experiencias”, señaló Patricio Carvallo durante la velada.
El Carmenere Gran Reserva
Edición Especial 20 Años destaca por su carácter profundo, notas especiadas y
elegancia en boca, reflejando la esencia del terroir del Valle de Colchagua y
la excelencia enológica de Viña Casa Silva. El vino estará disponible para los
huéspedes que adquieran el paquete aniversario, clientes del hotel y en eventos
especiales organizados durante todo el año conmemorativo.
Una celebración con la
comunidad y el futuro en mente
Desde abril, el hotel ha
impulsado una emotiva campaña digital invitando a quienes han vivido momentos
especiales en Sheraton Miramar a compartir sus recuerdos. Estas historias se
publican como parte de un archivo vivo de memorias que refleja dos décadas de
vínculos y emociones.
Además, el restaurante destaca mes a mes platos icónicos de su
carta y los huéspedes reciben obsequios únicos como recuerdo de esta
celebración irrepetible.
El gran cierre será en
diciembre con una gala y alfombra roja sobre el mar: una noche mágica para
brindar por el pasado, el presente y el futuro de este ícono costero.
Desde sus terrazas con vista al infinito hasta su impacto tangible en la comunidad, Sheraton Miramar es mucho más que un hotel: es un símbolo de Viña del Mar. Hoy, al cumplir 20 años como parte de Sheraton, celebra no sólo su historia, sino también su compromiso de seguir liderando el turismo de alto nivel con calidez, visión y excelencia.